Cómo organizar un bautizo (en 15 pasos)

En el mes de abril realizamos el bautizo de mi bebé Gabriel. Gracias a Dios todo salió muy bien en la ceremonia que para mi significó el inicio de su vida espiritual, pero la verdad es que coordinar un bautizo no es fácil jejeje!

Lo que lo hace complicado es tener que coordinar las agendas de los padres, los padrinos, los abuelos, los tíos etc., sobretodo cuando una parte de ellos viven en otras ciudades y países, y tomando en cuenta la disponibilidad que tenga la iglesia (muy importante!).

En este post les cuento los pasos que seguí para organizarlo, para aquellas mamás que no saben por dónde empezar.

El “tamaño” de la celebración lo debes decidir según los deseos (y presupuesto) tuyos y de tu esposo, pues para un bautizo puedes hacer algo bien sencillo y bonito, o algo mucho más grande y elaborado. En mi caso hice una celebración tamaño mediano (con unos 30 invitados y reservamos un salón de fiesta privado en donde ofrecimos un almuerzo).

Empecemos!

Paso 1: Reservar la fecha en la iglesia (normalmente las iglesias dan la opción de que sea una ceremonia privada y también están las ceremonias grupales que son en días fijos de cada mes).

Paso 2: Realizar el cursillo pre-bautismal (padres y padrinos) y completar la documentación requerida por la iglesia (usualmente piden documentos de identidad y partida de nacimiento del niño, padres y padrinos, certificados de bautizo y/o confirmación de los padrinos, entre otros).

Paso 3: Hacer la lista de invitados y decidir el presupuesto (en base a esto se decide todo lo que viene a continuación).

Paso 4: Decidir y reservar el lugar de la celebración (lugares usuales son una casa, un restaurante, un salón de eventos, etc.).

Paso 5: Diseñar y enviar la invitación (en mi caso la envié un mes antes de la ceremonia, aunque a los padrinos, abuelos y demás familiares cercanos les confirmé tan pronto reservé la fecha en la iglesia). Debajo les dejo una foto de la invitación para que la tengan como referencia y sepan cuales informaciones incluir.

Paso 6: Contratar fotógrafo para la ceremonia y/o celebración (algunas iglesias tienen un fotógrafo autorizado que es al único que le permiten tomar fotos, así que asegúrate de preguntar si puedes llevar uno diferente).

Paso 7: Determinar el menú y bebidas a brindar (esto va a depender mucho de la hora que se termine la ceremonia puedes desde ofrecer un brindis sencillo, hasta un brunch/almuerzo). En mi caso brindamos primero una bandeja de quesos y frutas, sangría y luego se sirvió un almuerzo.

Paso 8: Mandar a hacer torta y mini postres. Debajo fotos de la obra de arte que hizo la repostera Olga Lantigua de “Olga Artisan Cakes”.

Paso 9: Mandar a hacer las tarjetas de recuerdos y hacer (o comprar) los souvenirs (en ingles “favors). En mi caso mandé a hacer las tarjetas en Unigrafica en Santo Domingo, una empresa de tarjetería en Santo Domingo (ellos hicieron también las invitaciones de mi boda!).

Paso 10: Decidir decoración del lugar (y reservar una mesita para los regalos que le lleven al bautizado/a).

Paso 11: Comprar ropa y zapatos del niño para la ceremonia (lo tradicional para los bebés es un faldellin blanco). Toma en cuenta que algunas iglesias tienen restricciones respecto a la ropa. Para la celebración es bueno llevarle al niño un cambio de ropa más cómodo.

Paso 12: Elegir la ropa que van a usar la mamá y el papá.

Paso 13: Comprar regalos o detalles para los padrinos y abuelos para entregárselos el día del bautizo. En mi caso le imprimí una foto de mi bebé a cada uno, se las enmarqué y le escribí una tarjetita de agradecimiento.

Paso 14: Una semana antes del bautizo confirmar con los invitados su asistencia y con esto tener tiempo para ajustar las cantidades de comida y bebidas, etc.

Paso 15: El día antes de la ceremonia (la mayoría de estas cosas aplican solo para bebés): asegurarse de preparar el bulto del bebe con todas las cosas básicas (pañales, fórmula, cambios de ropa, wipes, mantas, medicinas, baby food, etc.).

Y bueno eso es todo! Cualquier pregunta o comentario de algo que me haya faltado, por favor no dejes de escribirlo en los comentarios debajo.

Besos,

Ana C.

P. S.: Aquí les dejo fotos del bautizo de Gabriel Alfonso:

Invitación (la diseñé yo misma en una aplicación que se llama PaperlessPost)

Torta elaborada por Olga Artisans Cake (ubicada en Doral, FL,)

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Tarjetas de recuerdo elaboradas por Unigráfica (Santo Domingo, Rep. Dom.)

Souvenirs o “favors” (estas cajitas las compré en Wal-Mart y les puse adentro unas medallas de la Virgen María que compramos el año pasado en el Vaticano)

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Las decoradoras en acción! (mi hermana Alicia y mi prima Laura)

Fin de semana en Saint Augustine

La ciudad de Saint Augustine, en la Florida, es considerada la ciudad más vieja de los Estados Unidos. En marzo la visité por tercera vez junto con mi esposo y nuestro bebé Gabriel. Queríamos cambiar un poco de ambiente así que planeamos un viaje corto (de viernes a domingo) para aprovechar y hacer un primer viaje con el bebé.

Ese viernes salimos alrededor de las 9 am y nos paramos en un restaurante Cracker Barrell, que son una cadena de restaurantes en las salidas de las autopistas donde sirven comida “comfort” y desayuno todo el día. En la entrada tienen una tiendecita con muchísimas cosas curiosas que a mí me encantan!

Unas cuantas horas después, cuando ya íbamos llegando a St. Augustine, hicimos una parada en la ciudad de Palm Coast, donde vive una gran comunidad de portugueses, para almorzar en un restaurante de comida portuguesa llamado Portugal Wine and Grill y que mi esposo ya conocía. Pedimos  cada uno su respectivo plato de bacalao (¡que delicia!) y de postre ellos tienen los famosos “pasteles de nata” pero ese día no habían por lo que pedimos a cambio un postre muy bueno y sencillo (y no tan dulce) llamado “Serradura” (crema  de leche con galletitas machucadas).

Finalmente llegamos a St. Augustine, muertos del cansancio, dimos una vuelta en carro  y nos regresamos al hotel a descansar para así tener energías para el día siguiente.

El sábado en la mañana, después de hacer un research en TripAdvisor, decidimos desayunar en un restaurante llamado Maple Street Biscuit Company que de verdad les recomiendo que vayan! Lo que más nos sorprendió fue un biscuit con pollo frito, pepper jelly y queso de cabra que pidió mi esposo (¡D-I-O-S M-I-O!). Estaba tan bueno que fuimos de nuevo al día siguiente para pedirlo pero los domingos están cerrados :(.

Caminamos y llegamos hasta la famosa Saint George Street, una calle en el “Old town” de St. Augustine, sumamente pintoresca y bonita pues esta llena de tiendecitas y restaurancitos. La recorrimos hasta llegar a la Catedral de St. Augustine y luego visitamos el Castillo de San Marcos. Después almorzamos en el famoso restaurante Columbia y finalmente conocimos la Oldest Wooden School in the US, una casita de madera donde niños del pueblo tomaban clases en el siglo XVIII, y con un jardincito mágico, ideal para sentarse a conversar y tomarse fotos.

Después de haber hecho todo esto todavía era de día por lo que decidimos ir a conocer el museo de Ripley’s Believe it or not en donde vimos muchísimas cosas locas y curiosidades (como el vestido más caro de la historia, vale ¡un millón de dólares!). Este fue el vestido que usó Marilyn Monroe en una fiesta de cumpleaños del Presidente Kennedy.

Con esto concluyó nuestro primer día en St. Augustine.

El domingo, como no queríamos regresar muy tarde a Miami, decidimos solamente ir al Potter’s Wax Museum (el primer museo de cera de los Estados Unidos) donde nos divertimos muchísimo viendo todas las figuras de personas famosas. Empezamos a manejar de regreso e hicimos una última parada en la Capilla de Nuestra Señora de La Leche y Buen Parto (Our Lady of the Milk and Happy Delivery), para aprovechar y dar gracias por haber tenido a Gabriel con un embarazo y parto sin contratiempos.

Nos faltaron varios lugares por visitar y cosas por hacer (como ir al Lighthouse de St. Augustine y hacer un Ghost Tour), pero como dicen: ¡hay que dejar algo para la próxima!

Photo May 05, 8 00 48 PMGabriel embelesado viendo los murales de la Catedral de St. Augustine

 

 

Cómo hacer una mesa de postre o dessert table

En febrero estaba buscando una actividad diferente en donde pudiera expandir mi creatividad y despejar un poco la mente. Con toda la novedad de ser mamá primeriza, esposa y reincorporándome a mi trabajo, estaba sumamente estresada.

Me enteré por Instagram de una clase en un bakery en Wynwood de “Cómo hacer mesas de postres” (el montaje y decoración, no los postres en sí) y decidí inscribirme para obtener algunas ideas para el bautizo de mi bebe que iba a ser en unos meses.

Para los que no conocen el barrio de Wynwood en Miami, es el distrito artístico de la ciudad, famoso por sus murales pintados bellísimos, las galerías, restaurancitos y bares diversos.

Seguramente el montaje de mesas de postres ha existido siempre, pero siento que últimamente están sumamente de moda y la verdad es que la gente se inspira! Creo que es porque son el punto central de la celebración donde se coloca el bizcocho o la torta, parte de la decoración y los mini postres, que sirven para entretener el paladar de los invitados durante el transcurso del evento.

Les quiero compartir algunos de los “highlights” de lo que aprendí en este curso, por si se animan un día de estos a montar su propia mesa de postre, ya sea para una celebración especial o simplemente para una reunión con amigos en casa:

Inspiración:

  • Lo primero es definir el tema o los colores a usar. La instructora nos comentaba que Pinterest, contrario a lo que muchas pensamos, no es la mejor fuente pues muchas de las fotos que se encuentran ahí no son tan fáciles de replicar.
  • La inspiración puede venir no solamente de una foto, también del diseño de un papel de regalo que veamos en una tienda, una tela que nos llame la atención, una película, etc. Solo que tenemos que estar abiertos a observar nuestro alrededor!
  • Finalmente podemos auxiliarnos de un “Inspiration Board” o Tablero de Inspiración (en internet aparecen varios templates), para escribir y organizar todas las ideas que nos surjan y así poderlas llevar a cabo con más facilidad.

Los colores:

  • Lo recomendable es elegir no más de 3 colores, 3 materiales y 3 texturas para la decoración de la mesa.
  • Los colores blanco, negro, dorado y plateado son colores muy fuertes y por tanto deben ser usados en un porcentaje muy mínimo.

Elementos básicos:

  • El elemento más básico de una mesa de postre son: ¡las cajas!  Las mismas las puedes re-usar y forrar con papel o tela y encima de las mismas se colocan los postres. Puedes usar cajas plásticas, de madera, cartón o  hasta cajas de zapatos!
  • Otros elementos importantes son: la base para la torta, envases transparentes para colocar los postres que no van en bandejas, floreros de tamaños grandes, medianos y pequeños para los arreglos flores y el mantel que va a llevar la mesa.
  • Algunas personas les gusta poner un “backdrop” detrás de la mesa para hacerlo más llamativo. En Amazon venden varias opciones e inclusive un “backdrop stand” que usas de base para hacerlo tú misma.

Los postres:

  • Existen miles de opciones de mini-postres que puedes elegir para tu mesa. Todo es cuestión de lo que te gusta a ti y a tus invitados. Los puedes preparar tu misma (si te gusta cocinar y te alcanza el tiempo), mandarlos a hacer a alguna repostería o si tienes un presupuesto bajo, comprar los que venden ya listos en los supermercados como Publix, Costco o Sam’s Club.
  • Para determinar cuántos postres poner puedes calcular 3 unidades de postres por persona. Si los invitados son muy “dulceros” o comelones puedes aumentar la cantidad a 4 o 5 unidades por persona.
  • Para “rellenar” la mesa puedes poner en los envases transparentes marshmellows, galletas, chiclets en forma de bolas, pop corn, etc, con los colores del tema.

Distribución de los elementos:

  • En la mesa todo debe colocarse de forma simétrica (lo que colocaste en un lado, debes colocarlo en el otro, buscando lograr un efecto espejo).

Un último tip:

Trata de montar la mesa unos cuantos días antes del evento para ver qué elementos te hacen faltan. Toma fotos y haz anotaciones de donde va cada cosa, para que ese día no se presenten imprevistos y la mesa quede perfecta.

Aquí les dejo una foto de la “mesa” de postre de mi boda, que obviamente no monté yo y no es la típica mesa de postre, pero me encantó como quedó (si se fijan esta foto fue tomada al final de la boda cuando ya se habian acabado todos los mini postres jejeje). La misma la hizo el team de decoración de mi wedding planner Novella.

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Créditos: este curso fue impartido por My Papilot quien es especialista en montaje de mesas de postres aquí en Miami. Sus mesas son de ensueño y sumamente creativas! Ella imparte cursos por todo Estados Unidos niveles desde básico hasta mas avanzado, para personas que quieren montar su propio negocio. Aquí les dejo su Instagram para que chequeen las bellezas que ella hace: @MyPapilot.

“Date night”

Una de las cosas que se me hacen más difíciles es comprar un regalo, y sobre todo si es para mi esposo. He llegado a la conclusión que los regalos que más le gustan a él son los objetos curiosos (como por ejemplo antigüedades) o experiencias y por tanto siempre trato de irme por una de esas opciones.

Para el pasado San Valentín, que cayó día de semana, decidí prepararle una cena romántica. La verdad es que a mí no se me da muy bien la cocina y unos días antes del 14 de febrero recibí un correo (¡gracias a Dios!) de una compañía de catering aquí en Miami que había usado antes (Inedit Gourmet) ofreciendo una cena de San Valentín para dos y decidí ordenarla.

Ellos me la llevaron directo a mi casa ese día en la mañana con las instrucciones de cómo calentarla. Para que se les haga agua la boca aquí les dejo el menú que nos prepararon, no se pueden imaginar lo delicioso que estaba:

Entradas:

Roll de salmón curado

Queso brie envuelto en filo y servido con mermelada de manzanas

Plato fuerte:

Pescado pargo rojo en salsa de mariscos

Acompañantes:

Puré de sweet potatoes con queso feta

Ensalada de quinoa con tomates cherry, cranberries secos, celery y un dressing de crema

Postre (esto lo preparé yo):

Fresas para untar con crema (de la que venden lista en el supermercado al lado de las frutas)

Aprovechamos para abrir una champagne que nuestra wedding planner nos había dejado en la habitación del hotel donde nos quedamos en nuestra noche de bodas ¡hacía dos años!

Preparé la mesita del balcón de nuestro apartamento con un mantel, servilletas de tela (las cuales doblé en forma de corazón con la ayuda de Youtube), velas y pétalos de unas rosas que mi esposo me había regalado hacía unos días y de sorpresa lo esperé vestida con un jersey del equipo de fútbol de Portugal (él es mitad portugués y siente una gran fascinación y conexión con esa cultura).

Photo Apr 04, 9 27 54 PM

“Hasta que me olvides, voy amarte tanto tanto” (la música que tenía de fondo mientras escribía este post :)…).

Te amo Pedro.

Besos,

Ana C.

“Stargazing Night” un tema diferente para un cumpleaños

Hace unas semanas celebramos el cumpleaños de mi hermana Alicia. Por su trabajo ella se pasa todo el tiempo viajando y por tanto en los últimos años le había tocado celebrar su cumpleaños fuera de Miami, pero este año coincidió que iba a estar aquí.

Ella estaba indecisa entre celebrarlo en un restaurante o hacer un “get-together” en su casa, pero finalmente decidió avisarle a un grupo de amigos cercanos para que fueran a su casa y así aprovechar la ocasión para estrenar unos muebles nuevos que había comprado por Amazon para su terraza.

Para hacerlo más divertido, Alicia eligió un “tema”: Stargazing Night” o “Noche para Observar las Estrellas”. Ella siempre ha sentido fascinación por las estrellas y la astronomía y la terraza de su casa es un lugar muy propicio para verlas, porque queda en un tercer piso y las noches en Miami han sido últimamente bastante claras y frescas.

Le prometí que me iba a encargar de comprarle el bizcocho (o torta) de cumpleaños. Estaba loca por ordenarle uno a una repostera dominicana que me había pasado el contacto mi prima Laura para probarlo y le explique más o menos la idea de lo que ella quería. Debajo les comparto una foto :).

Esa noche pasamos un muy buen rato. Alicia preparó unos tacos gourmet de pulled pork y pavo molido y se nos fue el tiempo entre bebiendo vino y jugando “Charades” (Dígalo como pueda).

“We are made of stars” literalmente.

Besos,

Ana C.

Photo Apr 03, 2 15 52 PM

P. S.: El bizcocho estuvo BUENISIMO, bello y sencillo como Alicia :). En la foto no se nota pero tenía dibujado una galaxia. Para los que les gustan los bizcochos dominicanos, les dejo el link de Facebook de la repostera, la sra. Olga Lantigua, quien se encuentra ubicada en la ciudad del Doral. ¡Ella es excelente!

Olga Artisan Cakes

Photo Apr 03, 3 04 02 PM

 

Una taza de té de jengibre

Uno de los recuerdos más felices de mi infancia era en el pueblo donde nació y creció mi madre y nos reuníamos toda la familia en la casa de alguno de mis tíos, a hacer un “jengibre”.

Hacer un “jengibre” consistía precisamente en eso, preparar un té de jengibre para beberlo con unas galletas sencillas de harina (mi mama las llamaba “galletas Gilda”). Durante la noche, los primos nos poníamos a jugar y a disfrutar que estábamos todos juntos en ese pueblito frío en la cima de una montaña, en el corazón de la isla.

De ahí viene el nombre de este blog.

Ahora, unas décadas después, soy una persona completamente distinta a la niña que era en esa época. Obviamente ya una adulta, con la vivencia de haber emigrado hacia otro país y haber vivido en varias ciudades, y ahora construyendo un hogar, con mi esposo y con un bebe de casi seis meses de edad.

El proceso de emigrar (¿o inmigrar?) es un proceso difícil, y el anhelo más grande que nos perturba a todos son esos momentos que tuvimos  en nuestros países con nuestros familiares y amigos.

“Éramos felices y no lo sabíamos”.

Con este blog busco compartir mis intentos de construir momentos “te de jengibre” en donde vivo ahora, en la ciudad de Miami, y con la esperanza de que quizás mis ideas le puedan servir a alguien en su proceso propio de construir este tipo momentos que le dan sentido a nuestras vidas.

Besos,

Ana C.